«Piense y Hágase Rico» de Napoleon Hill, es uno de los libros más valiosos de todos los tiempos, considerado como la Biblia de la Riqueza y el Éxito.
Desde su publicación ha vendido más de 70 millones de copias legales.
Considerado por algunos como la guía práctica de negocios más relevante del siglo XX.
¿Pero qué es lo que propone Napoleón Hill ? Él afirma que todo aquello que la mente humana pueda concebir se puede alcanzar y para ello expone 13 principios para volverte rico:
#1. Deseo
Es el punto inicial de todo logro. El primer paso hacia la riqueza es estar enamorado del objetivo.
El autor señala que “desear la riqueza con un estado mental que se convierte en una obsesión y luego planificar formas y medios definidos para adquirirla, y ejecutar esos planes con una perseverancia que no acepte el fracaso, atraerá la riqueza”.
– Henry Ford: Cuando quería fabricar su famoso motor V8 todos los ingenieros acordaron que era imposible colocar ocho cilindros en un motor de solo un bloque. Pero a pesar de todas las negativas lo único que dijo Ford fue “Prodúzcanlo de todas formas”.
Así que los ingenieros se pusieron a trabajar en algo que para ellos parecía “imposible”. Después de poco más de un año sin resultados y bastantes pruebas, el secreto quedó revelado ante ellos.
Lección uno: Si tienes determinación puedes lograr hasta las cosas que parecen imposibles.
– El tío de R.V Darby: Puso todas sus esperanzas en una mina porque creía que había encontrado su boleto de lotería, sin embargo, después de extraer el primer carro con minerales se dio cuenta de que no había más que extraer, por lo que decidieron parar y vender su maquinaria a un chatarrero.
Este chatarrero se asesoró con un ingeniero de minas y descubrió que los Darby´s pararon de cavar a un metro de todos los minerales.
Lección dos: Nunca te detengas y si lo haces asesórate para no dejarte llevar por la frustración.
– Thomas Edison: El inventor soñaba con una lámpara que funcionara con electricidad, por lo que empezó a poner su sueño en acción y sin importar los más de 10,000 fracasos que tuvo, mantuvo su sueño hasta hacerlo realidad.
Lección número tres: Los soñadores prácticos no abandonan.
#2. Fe
La fe se trata de visualizar y tener la creencia en la consecución del deseo, la fe es el elemento químico primordial de la mente que da poder y acción al impulso de pensamiento.
Se debe repetir una idea constantemente para creerla y la fe nos ayuda a alcanzar nuestras metas y sueños.
En el 2011, Eric Yuan renunció a su empleo para apostar por su propio proyecto. Así, en 2013 se lanzó la primera versión de Zoom, el programa de reuniones virtuales. Muchos no creyeron que podría tener éxito debido a que ya existían muchas opciones de videoconferencia en el mercado, pero Yuan siguió convencido que lo lograría.
Luego la historia de zoom ya es conocida. La fortuna de Eric Yuan actualmente supera los $21 000 millones de dólares.
#3. Auto sugestión
Hill afirmaba que “si no ves grandes riquezas en tu imaginación, nunca lo verás en tu cuenta bancaria”. La mente es muy poderosa por lo que es necesario creerse la idea y mentalizarse que eso que te propones será tuyo.
“Tu capacidad para utilizar el principio de la autosugestión dependerá, en gran medida, de tu capacidad para concentrarse en un deseo dado hasta que ese deseo se convierta en una obsesión ardiente»
Steve Jobs estaba obsesionado con la búsqueda de la simplicidad, de hecho, fue la esencia de la estrategia de Apple, y también de su forma de presentar. Ese factor logró llevar al éxito a la compañía.
#4. Conocimiento especializado
El saber un poco de todo no nos hará especiales, es necesario convertirnos en personas que dominen algún tipo de tema en específico, ya sea adquiriendo conocimientos sobre alguna materia en concreto o realizando alguna especialización que te permita enfocarte.
Napoleon Hill nos cita un ejemplo sobre el conocimiento especializado:
Durante la Primera Guerra Mundial, un periódico de Chicago publicó ciertos editoriales en los que, entre otras cosas, a Henry Ford -se le llamaba «ignorante pacifista». El señor Ford objetó esas afirmaciones y entabló un pleito por difamación contra el periódico. Cuando el juicio tuvo lugar, los abogados del periódico exigieron una justificación y llamaron al propio señor Ford al banquillo de los testigos, con el propósito de demostrarle al jurado que era un ignorante. Los abogados le hicieron a Ford una gran variedad de preguntas, todas dirigidas a demostrar de manera evidente que, si bien quizá poseyese una cantidad considerable de conocimientos especializados en lo que se refería a la fabricación de automóviles, básicamente era un ignorante.
A Ford le hicieron preguntas del estilo de: «¿Quién fue Benedict Arnold?», y «¿Cuántos soldados enviaron los británicos a las colonias americanas para sofocar la rebelión de 1776?». En respuesta a esta última pregunta, el señor Ford replicó: «Ignoro la cantidad exacta de soldados que los británicos enviaron, pero he oído decir que fue una cifra considerablemente mayor que la de los que regresaron».
Al final, el señor Ford acabó por cansarse de ese tipo de preguntas, y, para contestar una particularmente ofensiva, se inclinó hacia adelante, señaló con el dedo al abogado que había hecho la pregunta y dijo: «Sí de veras quisiera responder la pregunta tonta que acaba de hacerme, o cualquiera de las otras que me ha hecho, permítame recordarle que en mi escritorio tengo una hilera de botones y apretando el adecuado puedo llamar en mi auxilio a hombres capaces de responder cualquier pregunta que quiera hacerles en lo que concierne al negocio al que he dedicado casi todos mis esfuerzos. Ahora dígame para qué necesito llenarme la cabeza con conocimientos generales, con el fin de contestar preguntas, cuando dispongo de hombres a mi alrededor que pueden proporcionarme cualquier conocimiento que les pida».
Indudablemente, ésa fue una respuesta con mucha lógica.
Y dejó confundido al abogado. Todas las personas que había en la sala se dieron cuenta de que no era la contestación de un ignorante, sino de un hombre educado. Cualquier hombre es educado si sabe dónde adquirir el conocimiento cuando lo necesita, y cómo organizar ese conocimiento en planes definidos de acción. Mediante la asistencia de sus «equipos de trabajo», Henry Ford tenía a su alcance todo el conocimiento que necesitó para convertirse en uno de los hombres más ricos de Estados Unidos. No era esencial que tuviese esos conocimientos en la mente.
#5. Imaginación
Hill menciona que ” el hombre puede crear cualquier cosa que se pueda imaginar”, por lo que este factor es claramente importante en el camino hacia construir y obtener algo.
Las ideas son siempre el punto de partida de los éxitos. Date cuenta que grandes compañías como Apple, Google, Facebook se crearon a partir de una idea inicial. Todas comienzan con personas capaces de convertir sus ideas y deseos en realidad.
#6. Planificación organizada
Para obtener excelentes resultados, debes tener un plan. Necesitas poner tus ideas, tu imaginación, tu deseo en un plan preciso y realista.
Si el primer plan que tu adoptas no funciona con éxito, cámbialo por uno nuevo.
Si este nuevo plan tampoco funciona vuelva cambiarlo por otro y así sucesivamente hasta que encuentres un plan que dé resultado.
Michael Jordan hizo esta declaración: «He fallado más de 9.000 lanzamientos. He perdido casi 300 partidos. Desperdicié la canasta de la victoria 26 veces. He fallado una y otra y otra vez a lo largo de mi vida. Y por eso he alcanzado el éxito»
#7. Decisión
La decisión con que se hacen las cosas, representa una gran importante para lograr el éxito. La carencia de tomar la de decisión trae como consecuencia la derrota.
El hecho de saber tomar decisiones a tiempo y bien específicas, significan hacia dónde se dirige el individuo.
Una de las cualidades más notables de Henry Ford era su costumbre de tomar decisiones rápidas y definitivas. Esto le hizo ganarse la reputación de ser un hombre obstinado, pero fue esta obstinación lo que motivó a continuar la fabricación de su modelo T (uno de los coches más feo del mundo).
Aunque muchas personas (consejeros y clientes) le pedían a gritos que lo cambiará fue esta firmeza en su decisión lo que le permitió ganar una enorme fortuna antes de que se hiciera necesario cambiar el modelo.
#8. Perseverancia
Al igual que cuando aprendiste a caminar, habrá ocasiones en la que te caigas, sin embargo, esta habilidad será la que te ayude a levantarte y continuar a pesar de esa “caida”.
Un hombre con 65 años de edad, decidió hacer algo para mejorar su vida utilizando la receta de su mamá; y no fue nada fácil para él, tuvo que tocar cientos de puertas antes de conseguir que alguien probara su pollo frito.
Este hombre se llama Coronel Sanders, quien fundó la cadena de restaurantes de comida rápida conocida como (KFC)
#9. El poder de trabajo en equipo
Nadie logra sus objetivos totalmente en solitario, necesitas a las personas, su consejo, su ayuda, su cooperación.
Si consigues organizar el trabajo en equipo y dirigirlo de forma inteligente podrás alcanzar un propósito definido.
En 1901, William S. Harley y Arthur Davidson se metieron en un cobertizo a inventar una moto. Con la ayuda de un hermano mecánico de Davidson y de algunos amigos, comenzaron a dar forma a su sueño. Los problemas fueron muchos, pero los salvaron con imaginación. Con tanta que para fabricar el carburador de la primera Harley utilizaron una lata de tomate.
#10. El misterio de la transmutación sexual
El deseo sexual es el más poderoso de los deseos del ser humano. Genera una motivación que despierta imaginación, voluntad, coraje y persistencia desconocidas para muchas personas.
Napoleón Hill nos dice que esta energía sexual puede redirigirse hacia otros propósitos, con asombrosos resultados. Esto no es fácil de conseguir, pero merece la pena.
Las páginas de la historia están llenas de casos de grandes líderes cuyos logros se basaron en la influencia de mujeres que despertaron en ellos las facultades creativas de sus mentes a través del estímulo sexual.
Napoleón Bonaparte fue uno de ellos. Cuando se sintió inspirado por su primera esposa, Josefina, fue irresistible e invencible. Cuando su «mejor juicio», o su facultad de razonamiento, lo impulsó a dejar de lado a Josefina, empezó a declinar. Su derrota y su destierro en Santa Elena no estaban lejanos.
#11. Subconsciente
El subconsciente es una de las partes más importantes de la mente humana. Aunque no puedas controlarlo, sí que puedes entrenar tu subconsciente a través del hábito.
Puede que no te des cuenta, pero tu subconsciente siempre está activo, funcionando. Por eso tienes que tener cuidado con el tipo de pensamientos que le transmites.
Si sueles tener sentimientos y pensamientos negativos, eso se transmitirá a tu subconsciente, y reforzará la idea de que no eres capaz de lograr tus metas.
Es importante tener claras cuáles son las principales emociones negativas, para poder evitarlas: miedo, ira, venganza, celos, odio, codicia y superstición.
En cambio, si coges el hábito de poblar tu mente de pensamientos positivos, eso irá poco a poco calando en tu subconsciente. Tu subconsciente a su vez te irá transmitiendo sensaciones positivas, que harán que sea más fácil que consigas tus objetivos.
Hill no deja esta frase “Cualquiera puede desear riquezas, y la mayoría de la gente las desea, pero sólo unos pocos saben que los únicos medios fiables de acumular riqueza son mediante un plan definido, además de un ardiente deseo de alcanzar la riqueza“
#12. El cerebro
Napoleón Hill afirma que el cerebro es bastante similar a una radio, así que al igual que la radio tu cerebro trabaja con frecuencias que son emociones tanto de amor, odio, desesperación, miedo o confianza.
Pero si te das cuenta la radio solo puede emitir sonido cuando el transmisor y el receptor están configurados en la misma frecuencia. Entonces si deseas que tu cerebro te proporcione riqueza, debes asegurarte de que tus emociones reflejen esa frecuencia.
Pon tu cerebro en esas frecuencias de amor, confianza y sentimientos abundantes de esa manera esas cosas serás las que esperaras recibir.
#13. El sexto sentido
El sexo sentido es esa porción de la mente subconsciente que hemos llamado imaginación creativa, a través de la cual las ideas, los planes, y los pensamientos surgen de la mente.
También llamamos a estos destellos como: presentimientos, intuición o inspiración.
Si dominamos los 12 anteriores principios podremos alcanzar el sexto sentido y éste actuará en nuestro beneficio.